Vicente Sanz, ex jefe de personal de Canal 9, deberá permanecer a más de 300 metros de las tres periodistas que lo denunciaron hace un mes por un presunto delito sexual. Así lo decidió ayer la titular del juzgado de primera instancia e instrucción de Paterna (Valencia) tras su declaración durante casi cuatro horas. Sanz llegó acompañado de su abogado y su mujer, Esther Franco, diputada del PP en Les Corts. En la puerta del tribunal le esperaban una decena de trabajadores con máscaras blancas y pancartas con lemas como "ni puercos ni bigotes" o "Canal 9, ni manipuladores ni acosadores". Es el último escándalo al que se enfrenta la cadena.
Tras declarar, Sanz abandonó los juzgados acompañado de su abogado. Cuando se aproximaron los periodistas, aligeró el paso, aunque contestó que tenía la conciencia "tranquila". Su letrado no fue más explícito. Se acogió al "secreto de sumario". Un día antes, las tres periodistas habían ratificado su denuncia. Más de siete horas duró su declaración, a través de la cual desgajaron el viacrucis al que supuestamente les sometió Vicente Sanz desde el 2007, y que consistió en amenazas, vejaciones sexuales y todo tipo de presiones.
"Necesitamos hablar urgente. Acoso Sanz". Este es el texto que supuestamente recibió en su móvil, a finales de octubre, José López Jaraba, director general de Radiotelevisión Valenciana (RTVV). Así lo explicó el pasado miércoles la diputada socialista Nuria Espí durante la comisión parlamentaria de control al ente público. López Jaraba negó tener constancia de ningún tipo de acoso en aquellas fechas. "La duda ofende", argumentó. Pero según publicó El País, la denunciantes intentaron ponerse repetidamente en contacto con él y con Lola Jhonson, directora de Canal 9, pero "todo fueron largas".
Según el máximo responsable de Canal 9, se enteró de lo sucedido el 12 de febrero e inició "una investigación interna". Nueve días después, el escándalo trascendió y Sanz fue apartado temporalmente. El PSPV-PSOE asegura que durante esa semana y media, el ritmo fue frenético dentro de la televisión.
Fuentes de Canal 9 afirman que López Jaraba visualizó una cinta de alto contenido sexual, con Sanz como protagonista, que grabaron con cámara oculta las periodistas para probar sus acusaciones. Al poco, López Jaraba se reunió con Nuria Romeral, secretaria autonómica de comunicación. Mientras tanto, según estas fuentes, Vicente Sanz se desvivía por conocer la identidad de las denunciantes. Llegó a señalar hasta 16 nombres de una lista de trabajadoras.
Nuria Espí, del PSPV, exigió ayer de nuevo su "cese inmediato y definitivo". Lo mismo que Mònica Oltra (Compromís), quien manifestó que no hacerlo "es una manera de apoyarlo y de desproteger a las periodistas". Oltra también recordó que no es la primera vez que el presunto acosador está en el ojo del huracán. Sanz fue presidente del PP en Valencia entre 1993 y 1994, cargo que abandonó tras conocerse una grabación en la que aseguraba estar en política "para forrarse". Desde entonces ha ocupado puestos de relevancia en Canal 9.
La declaración de Sanz ante la juez monopolizó ayer portadas y sumarios en todos los medios menos en Canal 9. El informativo de mediodía de la televisión pública no le dedicó ni un segundo. Tampoco cuando trascendió el escándalo. "No es el único caso de silencio y manipulación informativa", denuncia Espí. La reciente dimisión del director del Museu Valencià de la Il·lustració i la Modernitat (Muvim) tras la censura a una exposición con fotos del caso Gürtel, apenas ha tenido repercusión. Sólo 20 segundos en el informativo del 9 de marzo, sin nombrar la palabra "censura" y en el penúltimo lugar de la escaleta.
Otro asunto que Canal 9 ha puesto bajo llave es el de la Gürtel. La trama corrupta se obvió durante meses y se trató por primera vez el 7 de octubre. Aquel día, la revelación parcial del sumario se despachó en 29 segundos, muy por detrás de noticias como la subida del precio del ketchup o la desarticulación de bandas delictivas. La oposición critica que Camps ha convertido Canal 9 en una torre de marfil donde se refugia y reinterpreta la realidad.
Las reiteradas denuncias de manipulación o los presuntos delitos sexuales de Sanz no son los únicos problemas a los que se enfrenta López Jaraba. El PSPV-PSOE reveló la semana pasada que en los últimos meses recibió 24 requerimientos por impago a Hacienda en el 2005 y 2006. Unas deudas que le han supuesto embargos de cuentas corrientes. López Jaraba, en declaraciones a Público, acusó a los socialistas de "juego sucio" y explicó que los impagos se debieron a "motivos familiares" y que entre julio y septiembre de 2009 se puso al día con Hacienda "en un 99%, ya que puede ser que quede algún fleco pendiente". Nuria Espí exigió ayer "un explicación más contundente" porque alguien que gestiona "la empresa pública valenciana más importante, con 1.200 millones de deuda, debe ser escrupuloso con Hacienda".
López Jaraba fue nombrado director general de RTVV el 18 de agosto tras la dimisión de Pedro García, salpicado por la Gürtel. Bajo la dirección de García se adjudicó por 6,5 millones, el doble de su valor, la sonorización del acto central de la visita del Papa a Valencia (julio 2006) a TECONSA, empresa implicada en el organigrama de la trama corrupta. López Jaraba ha negado continuamente a la oposición información sobre este contrato
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